NACIMIENTO DE LAS
ESCUELAS PARA LOS HIJOS DE LOS TRABAJADORES 1960
Fundada en 1959, como la concentración número 2, nuestra sede
Infantas fue la primera gran escuela para hijos de obreros de ECOPETROL
construida en la ciudad. Claro está que antes ya funcionaban unas escuelas para
estos niños, las cuales se distribuían así: escuelitas de los campos 6, 23, 5 y
la concentración número 1 en el
corregimiento del Centro. En la ciudad, el vicariato atendía la educación de
los hijos de los obreros en una escuela ubicada más arriba del antiguo
aeropuerto, ubicado en donde hoy es en Colegio Diego Hernández de Gallegos.
Esta escuela estaba dirigida por el Padre
Grillo, quien fuera tristemente recordado por sus sermones incitando a
matar liberales.
Luego de Creada la Sede Infantas, que se llamaba concentración número 2, ésta se ganó un
CONCURSO DE ARQUITECTURA EN ARGENTINA por
su novedoso diseño y áreas adaptadas a las condiciones climáticas. Durante esta
década se construyeron las otras dos sedes, pero con el nombre de Concentración 3 (hoy El Parnaso) y Concentración 4 (Hoy, Miramar).
Es de mencionar que el colegio LUIS LOPEZ DE MESA, fue creado como una escuela para los hijos de
los norteamericanos en la década de
1930 y recibió su nombre actual sólo durante la década de 1960, en honor a un
ex ministro de educación, promotor de extrañas ideas como oponerse a la entrada
de judíos a Colombia tras la segunda guerra mundial y al mestizaje con indios y
gentes del campo que, según él podría generar ¨una degradación de la ciudadanía¨. El Colegio EL ROSARIO, se fundó en 1952 con el nombre Intercol Staff School y luego recibió su nombre actual porque así
se conocen los terrenos donde fue edificado; éste colegio era solamente para
hijos de directivos de
ECOPETROL.
El primer director de las Concentraciones fue VALENTÍN MELENDEZ y por ello a la
concentración número 1 le decían la escuela Valentín, luego llegó JAIME OSPINA ORTIZ, quien es recordado por haber recibido educación en
Francia y traer la planeación de clases para profesores y ordenar que la
educación fuera MIXTA y no niños separados de niñas, como lo había organizado
el Padre Grillo. Desde estas tempranas épocas, los profesores recogen a los
niños en sus casas a partir de las 5:30 de la mañana en las acostumbradas RUTAS
de los buses verdes. Los directores de las concentraciones se rotaban el cargo
de dirección. La construcción del Barrio el Parnaso trajo más niños y las
escuelas se organizaron así:
Concentración 4: Primero y segundo de primaria. (Hoy Miramar)
Concentración 3: Tercero y cuarto de primaria. (Hoy El
Parnaso)
Concentración 2: Quinto de primaria. (Hoy Infantas)
Los castigos físicos estaban a la orden del día, desde los
inicios de las escuelas, en la concentración número 1, se tiene noticia de un
profesor que portaba un látigo con punta de balines. Pese a que las escuelas ya
no estaban bajo la dirección del Padre Grillo, todavía la influencia de la
Iglesia era muy fuerte, se sabe que, empezando la década de los sesentas una
maestra de nombre Lucía Jiménez, tuvo un inconveniente en el trabajo y para
buscar una solución decidió irse de monja y así empezar de nuevo otro proyecto
de vida en el monasterio.
LA COMUNIDAD EDUCATIVA
SE CONSOLIDA 1970
Los profesores fueron beneficiados en su condición laboral, a
partir del año 1974 cuando pasaron
de la nómina del Centro a la nómina de Refinería y pasaron a ser directivos y
recibir así mejores salarios, además de los servicios médicos, plan educacional
y entrada –sin ser socio- al club Miramar. Esta condición, implicaba a los
profesores una situación bastante delicada cada vez que había huelga en
Barrancabermeja, pues si no iban al trabajo serían sancionados y para llegar
hasta su lugar de trabajo recibían todo tipo de insultos como, esquiroles,
patevacas, rompehuelgas, lambericas, incluso les arrojaban piedras a sus
vehículos. Pues con mucha dificultad los profesores tenían que llegar y se les
tenía prohibido adherirse a estos movimientos, precisamente por ser directivos
de ECOPETROL.
Una profesora participó activamente de la huelga de 1977, con
tan mala suerte que la trasladaron de la concentración 2 (hoy sede Infantas),
para el Rosario a manera de castigo; ella nos contó que fue muy duro y de lo
que menos le gustaba de su nuevo lugar de trabajo, era que tenía que llevar
media pantalón, lo cual era muy incómodo por las altas temperaturas. Hasta esta
década ECOPETROL destinaba una buseta que llegaba al colegio con el sueldo de
los maestros envuelto en un sobre luego, el pago se empezó a hacer a través del
banco.
Los niños de aquél entonces podían terminar su primaria a
edades que llegaban hasta los 15 años de edad, además en los salones se
atendían grupos de 40, 45 y hasta 50 niños, lo cual dificultaba el aprendizaje
y la disciplina, si se tiene en cuenta que además los niños ingresaban a
estudiar el primerito con 8, 9 o hasta 10 años. Barrancabermeja, tenía un clima
más fresco debido a la gran cantidad de árboles y cuerpos de AGUA LIMPIA que
había cerca al colegio y que no se utilizaba tanto el automóvil porque dentro
de la convención colectiva del trabajo, cada obrero tenía derecho a su
respetiva bicicleta.
La educación era muy estricta, pero en las tardes se
implementó el coro, que ensayaba en un salón donde había un piano, o se hacía
siembra de árboles y plantas de jardín.
Al igual que hoy, ECOPETROL suministraba todos los útiles necesarios,
sólo que no se entregaban al principio de año sino que cuando un estudiante
necesitara algo se lo entregaban inmediatamente. Pese a este incondicional
apoyo, ocurría en este entonces que algunos padres no matriculaban a sus hijos
para el bachillerato, debido a prejuicios, como que el estudio no es una
oportunidad relevante en la vida de una persona.
Era común la llegada de misiones de salud provenientes de
Policlínica, que hacia correr a los estudiantes atemorizados por las vacunas y
los implementos de odontología. Los
castigos físicos se seguían impartiendo a los niños, entre ellos estaban el
pellizco, arrodillada en el patio bajo el sol, jalón de orejas, el cocotazo,
golpe con anillo, reglazo y azote con vara de bambú en las formaciones; la
razón por la cual continuaban los castigos es muy sencilla, si un estudiante
decía en la casa que sus profesores le estaban pegando en el colegio,
seguramente sus padres le propinarían una buena reprensión por haberse portado
mal, así que primaba la ley del silencio.
Las meriendas u onces más comunes eran el millo, salpicón con
pancito y queso, frescola porque no existía la gaseosa, frutas y salchichas que
regalaba el comisariato (Lugar donde los obreros conseguían comida a bajos
precios, como forma de auxilio económico brindado por La Empresa y que generaba
mucha demanda a los productores locales).
A continuación, vamos a recoger algunas ANECDOTAS DE ESTUDIANTES:
+ El hermano de la maestra Rosa Acosta, no aprendía a leer en
ningún grado, pero como era hermano de ella todos los profesores le pasaban el
año sin saber leer. Pero cuando Llego al curso de la profesora Rosa, ella le
hizo perder el año a su propio hermanito porque no aprendía a leer. Este niño,
protagonizó un hecho muy particular. Durante una izada de bandera, un profesor
notó que él no estaba cantando el himno, entonces detuvo la música y le dijo al
niño: ¿por qué no canta el himno? A lo cual él respondió, - Yo no quiero decir
mentiras, son mentiras todo lo que el himno dice!. Entonces el niño, sin dejar
hablar al profesor, siguió gritando - ¿ acaso ya cesó la horrible noche?, ¿
cuál libertad quiere usted que cante si acá sólo me dan órdenes?.
+Durante éstas épocas había niños con necesidades económicas,
en especial un hijo de una de las lavanderas del barrio Pueblo Nuevo, éste
pequeño no tenía quien le diera almuerzo y como en esa época las mamás les
servían comida a sus hijos de manera muy exagerada, entonces el niño le llevaba
un bocado de almuerzo a su compañerito envuelto en hojas. La madre se percató
del hecho y le preguntaba si era que tenía alguna novia a la que le estaba
dando la comida, el niño le contó la verdad y la respuesta de su mamita fue: Me
trae ese niño ya para acá, para que coma con nosotros.
+En esta época se veía que un sólo padre tuviera muchos hijos
en las concentraciones; por ejemplo, un señor llegó a tener 20 hijos
matriculados y estaba orgulloso de tener ese record. Un rector, se puso a la
tarea de reunir a todos los hermanos que no se conocían, para que se apoyaran
entre sí, porque había niños del mismo papá, pero con diferencias de estrato,
así que las mamás se hicieron amigas por medio del colegio y en la casa donde
hubiera más mercado iban los hermanos a comer merienda y almorzar. Incluso,
había un señor de apellido Villa, que era muy conocido por tener bastantes
hijos y prestar el servicio de los buses pues cuando se pensionó ayudó a fundar
la empresa Transportes San Silvestre. Una vez un docente citó al señor Villa,
porque uno de sus hijos se estaba portando mal, cuando el señor villa llegó al
colegio, le preguntó al docente: ¿acá estudia un hijo mío de nombre XXX Villa?,
¿Si?, ya debe estar grande, cierto profesor?.
INNOVACIONES
PEDAGÓGICAS Y CAMBIOS EN LAS ESCUELAS DE ECOPETROL (1980):
Los profesores que pasaron por el Infantas, recuerdan estos
años como una época vivida en la más sincera camaradería, se reían muchísimo y
celebraban la fiesta de la vida en cada recreo, organizando pequeños compartir
con pescado frito, yuca, suero costeño, patacones, carne asada y limonada. Se
rotaban la traída de la comida, un día dos, otro día otros dos y así nunca
faltaba la buena comida, hasta se llegó a organizar asados, como compartir en
los distintos grados, utilizando los pupitres viejos como leña.
En el año 1989, se dispuso que cada sede tuviera los cinco
grados de primero a quinto, además en 1987 se recibieron a los últimos
profesores con contrato indefinido con ECOPETROL, lo cual era casi como ganarse
la lotería. En adelante, cada profesor seguiría siendo contratado por La
Empresa, pero a término de un año. En 1989, cada concentración recibió su
propio nombre, así , la dos Infantas, la tres El Parnaso y la cuatro Miramar;
además cada una tenía todos los grados de 1° a 5° y se empezó a organizar el
horario de tal manera que cada profesor fuera dictando una sola materia, y no
uno sólo dictándoles todas al mismo grupo.
Con la década de 1980, se puso FIN A
LOS CASTIGOS FÍSICOS, ya que se les empezó a dar capacitaciones a los
docentes con las Universidades Pontificia y Javeriana, se empezaron a contratar
profesionales en psicología, por esto en lugar de los horribles castigos
físicos se implementaron estrategias pedagógicas como: quitar minutos del
descanso sino se portan bien, la entrega de algunos premios por buena conducta,
asear las bodegas donde estaban los libros de todos los estudiantes, ubicación
en el cuadro de honor, ofrecer ¨punticos en la calificación¨. Y así, los
padres, con ayuda de la USO pusieron freno a esta práctica tan reprochable,
definitivamente los tiempos estaban cambiando.
Luego, llegaron las innovaciones
pedagógicas, las matemáticas modernas, la enseñanza del inglés, la biblioteca que era donde hoy
es la sala de inglés, el uso de títeres, teatrinos y marionetas, la designación de encargos como borrar
el tablero y sacudir los borradores, hacerse la estatua para que los niños
reaccionaran y otros, como hacer dibujar a un niño un árbol con TODAS sus hojas
y hacer que el estudiante ponga en fila 10 hormigas y entienda que algo similar
le ocurre al docente. Se empezaron a recibir estudiantes con necesidades
educativas especiales, motivando la implementación de estrategias como no
gritar, organizar clases de danzas y realizar operaciones matemáticas con
objetos.
Los profesores recuerdan mucho un carnaval de los valores,
cuando se disfrazaron de payasos y
salieron en caravana a enseñar valores morales, realizaban actividades como
concursos de poesía, integraciones en el colegio Luis López de Mesa, procesión
de la Virgen María en Mayo con pólvora, participación en las fiestas del
petróleo, obras de teatro, el cumpleaños
de la ciudad, festival de la cometa, organizar desayunos después de las
primeras comuniones, concursos de baile (entre los cuales se recuerda mucho una
comparsa llamada la danza de las obreras, la cual gustó tanto que ECOPETROL se
dio una bonificación laboral a la profesora).
El trabajo en valores morales daba su fruto, por ejemplo, en
los descansos los niños jugaban ajedrez, y si no terminaban la partida dejaban
el tablero con las fichas en el pasillo y al siguiente recreo, seguían la partida
y nadie movía las fichas.
Durante la década de
1980, se vivieron en Barranca fuertes enfrentamientos por la presencia de los
grupos guerrilleros, primero y después paramilitares; así mismo, se presentaban
paros cívicos que eran una expresión de la ciudadanía para exigir respeto por
el derecho a la vida y a la dignidad (servicios públicos en barrios informales
y obras de infraestructura).
En este contexto, los docentes continuaban con sus rutas por
el sector nororiental y el As de Copas. Una profesora notaba que el niño al
bajarse de la ruta, salía corriendo en zig-zag por toda la cuadra hasta llegar
a su casa y en las mañanas hacía lo mismo para subirse al bus. Al preguntarle,
el chico respondió, - Profe yo corro así, por si hay una balacera que no me
pase nada. En ocasiones, los buses fueron interceptados por miembros de la
guerrilla que pedían al profe encargado de la ruta, los llevara en su recorrido
hasta cierto punto. A los profesores les causaba tal temor esta situación, que
le decían a los guerrilleros, - Claro chinito siga, ni más faltaba Doctor. En
alguna ocasión, una profesora muy nerviosa venía encargada de una ruta que fue
interceptada por una multitud en el As de Copas y ella salió corriendo, dejando
al conductor con la ruta y los niños en aquél lugar.
La vida de las concentraciones que ahora se llamaban El
Parnaso, Miramar e Infantas se mantuvo como una representación de la ciudad en
forma de infancia, astuta y adaptada al entorno. Como no había preescolar los
niños llegaba a primerito sin hábitos de estudio, ¨como unos potros¨, diría
alguna maestra y se tardaban mucho en enseñarlos a obedecer. Por ejemplo, un
niño del Miramar se escapaba del colegio, iba a la ciénaga y regresaba con un
pato en la mano, a otra niña, un día la profesora le preguntó ¿tu eres la niña
de apellido Rico? Y ella responde sonriente, - Ay profe somos más pobres. Con
rostros únicos, pasamos a la última década del siglo XX.
ECOPETROL SE SEPARA DE
LAS ESCUELAS Y COMIENZA OTRO NUEVO CAMINO (1990-2019)
El año de 1996 es recordado por todos con una sonrisa y una
lágrima, porque fue cuando ECOPETROL dejó de ser el administrador de los
colegios, para entregarlos en contratos que realiza cada cierto número de años
con entidades y empresas educativas.
Empecemos diciendo
que, el fuerte trabajo docente en diversión, integración y valores mantenía
espacios de fraternidad entre los estudiantes, por ejemplo, los niños de quinto
grado eran los encargados por turnos de vender la gaseosa en la cafetería
durante todo el año y al final, cada uno recibía un pequeño sueldito que lo
enseñaba a trabajar tranquilamente para ganarse la vida. Las meriendas de los
niños eran las papas chorreadas y huevo cocido, durante las épocas de cosechas
de mangos se acostumbraba reunir todos los mangos que los estudiantes
encontraran y se repartían entre los más aficionados ¨chupemango¨, se
preservaba el hábito de cultivar semillas y sembrar plantas, cuidarlas y
abonarlas, logrando la presencia de más diversidad de animales, a tal punto que
incluso en la cafetería del Miramar aparecían huevos de tortuga.
Se implementó durante un tiempo el hábito de andar pendiente
de otro estudiante en los descansos, actividades y sobretodo en el desarrollo
de compromisos académicos, pero sin afectar el trabajo en grupos. Ecopetrol
invitaba conferencistas, empezado a acercarse a ASPAEN, porque contrataba capacitaciones para docentes con la
Universidad de La Sabana. También se
anticipó a muchos otros colegios del país con las aulas de informática, los
odontólogos seguían haciendo sus visitas a las escuelas para revisar a fondo
las sonrisas de los niños, que corrían asustados por los pasillos.
En el año de 1996, Ecopetrol se fue y muchos docentes
tuvieron que irse a trabajar en oficinas mientras se pensionaban, a otros los
pensionaron, incluso en esa época llegaron profesores provenientes de Tibú
donde Ecopetrol también tenía otro colegios para hijos de obreros. La partida
de estos docentes y algunos administrativos o personas de servicios generales
fue algo dramático y triste, la identidad y el apego que generaba el Infantas
era muy fuerte y entre lágrimas se dio la despedida, ECOPETROL ya no tenía
relación tan directa con los colegios.
En medio de estos hechos, se presentó en Barrancabermeja un
éxodo de campesinos que venían huyendo de la guerra entre las guerrillas y los
grupos paramilitares en regiones como el sur de Bolívar, la cordillera de los
Yariguíes, el Opón y el rió Cimitarra al margen occidental del río Magdalena.
Para llamar la atención de las autoridades, miles de campesinos se tomaron las
escuelas como lugar de campamento, con tan mala suerte que la falta de atención
a sus demandas hizo que su estadía en los colegios se prolongara, generando
daños en los baños y uso de pupitres como leña para cocinar los alimentos,
además de la pérdida de material de archivo y generando paradójicamente otro
desplazamiento, el de los estudiantes y profesores que tenían que hacer clases
en otros colegios de la ciudad, con cierta dificultad e incomodidad.
Durante esta década de 1990 se produjeron algunos otros
cambios, a los profesores se les hacía venir en las tardes en forma
obligatoria, ya que antes era opcional, pero todos ellos recuerdan que aunque
al principio no les gustó venir en ese horario, pronto se adaptaron y siguieron
viniendo a trabajar con la alegría que los caracterizaba. Una figura que
merecer mirar es la del capellán. El padre Portala (egresado de estas
escuelas), señala en una entrevista que ¨
los niños son muy mimados hoy en día, por ejemplo no van a misa si llueve y en
la casa les dan demasiada protección. La capellanía se perdió y pasó a ser más
una orientación espiritual, donde el sacerdote se vuelve uno más del grupo.
Dentro de la lista de los egresados con renombre encontramos
personajes de la vida religiosa como el mismo Padre Portala, el Padre Jair, el
Padre Nel Beltrán (Obispo emérito), el Padre Montagú. En la parte científica,
el Doctor Yesid Blanco, pediatra e investigador ambiental sobre temas como la
contaminación de las ciénagas y los efectos del fracking en la salud humana.
Así mismo, un importante personaje de la vida política como Elkin Bueno, a
quien su maestra recuerda como ¨el
alcalde pachanguero¨.
A partir de 1996, los colegios Infantas, El parnaso y
Miramar, pasaron a ser administrados por la Universidad Industrial de Santander
hasta 2008, luego estuvo administrado por PROFED y a partir del año 2018 por la
Asociación para la Enseñanza ASPAEN. Durante estos años, también podemos
mencionar varios cambios, como la implementación de la figura del personero y
el gobierno escolar a partir de la promulgación de la Ley 115 de Educación, que
trajo la democracia a las aulas y convirtió a los estudiantes en veedores y
protagonistas de su propio proceso educativo. En 2004, siendo Rector Don
Arnulfo Arenas, se dio el salto más importante en los últimos tiempos, al
conseguir la aprobación de enseñar BACHILLERATO, fusionando las tres escuelas
en la INSTITUCIÓN EDUCATIVA INFANTAS SEDES MIRAMAR Y EL PARNASO. Muchos
triunfos y experiencias, ha cosechado nuestra institución en los últimos años,
tanto en el campo deportivo como artístico y académico, entre ellas la
composición de su bello himno por dos docentes.
Para terminar, compartimos una reflexión hecha por el ex
rector Alejandro García, un experimentado líder de los docentes, quien a sus
sabios años nos dice a profesores, trabajadores de la institución en general y
especialmente a los estudiantes: EL
APORTE DE ECOPETROL ES PARA QUIENES SABER APROVECHAR EL PLAN Y TODOS LOS
BENEFICIOS DE ESTOS COLEGIOS.
Hola , ante todo me presento mi nombre es lentner jaraba hijo de un pensionado de ecopetrol gracias a dios mi padre esta vivo tiene 98 anos de edad ,habia algo que yo no sabia era la historia de als escuelas donde yo estudie tremendo vivimos en el barrio el parnaso nos
ResponderEliminarCriaron nuesttos padres para esa epoca ene ese barrio mi padre adquirio la casa en 1959 o 1960 si no me equivoco una gran leyenda empesaba cuando naci empece a criarme en mi barrio y conociendo a mis vecinos y amigos de la cuadra y la oportunida de. Aprender en estas escuelas donde hubo y hay recuerdos que deje que nunca se me han olvidado deseo algun dia regresar ami tierra y recordar y pasear e na las calles donde me crie y llegar a esas escuelas donde oculta ciertas historias y travesuras de mi vida actualnente vivo en los estados unidos no me quede en colombia decidi emigrar mas lejos pero mis recuerdos de mi tierra barrameja me persiguen historias bonitas y no bonitas que vive en esa epoca felicito alas personas que escribieron. Este articulo gracias a ellos redactaron algo que yo no sabia como comenzo la historia de las escuelas hasta el dia de hoy este es mi email si desean contactaser conmigo lentner.velilla @gmail.com